Una situación que se presenta con cierta frecuencia entre personas que tienen una empresa, puede ser una sociedad limitada, es que desean adquirir un coche pero no saben si la mejor manera de comprarlo es hacerlo desde su negocio o bien a título particular.

En ese caso, para poder tomar una decisión en firme resulta necesario conocer una serie de aspectos fundamentales que ahora vamos a mencionarte en las que son las dos opciones posibles:

Primera opción – compra desde la empresa

En primer lugar, si se opta porque sea la empresa la que compre el vehículo privado, se debe de tener en cuenta que lo debe ceder al beneficiario mediante lo que se conoce como retribución en especie.

Cuando se lleva a cabo la retribución en especie hay que tributar en IRPF y se considera que es una alternativa interesante para la citada sociedad, en tanto en cuanto va a poder deducirse todos los gastos que se encuentran asociados al vehículo, es decir, la gasolina, las reparaciones que sean necesarios, el mantenimiento…

Además, hay que tener en cuenta que si la persona utiliza el automóvil tanto para el trabajo como para su vida privada, únicamente tendrá que computar como retribución en especie el porcentaje correspondiente al uso que realiza del mismo a nivel personal.

Eso sin pasar por alto que con respecto al IVA se conseguirá un relevante ahorro si la compra del vehículo la realiza la empresa.

Segunda opción – compra como particular

También se puede tomar la decisión de que sea el particular, la persona física, la que compre el vehículo. En este caso, hay que tener en cuenta que la empresa lo que deberá hacer es pagar un mayor salario en metálico para que realice la citada adquisición. Esa es la manera de que esa persona pueda afrontar el gasto de la compra del coche sin que sus ingresos puedan verse disminuidos.

Eso sí, hay que tener en cuenta que al decantarse por esta segunda opción esa persona física tendrá que hacerle frente a un mayor pago tanto en el IRPF como en el IVA.

Por todo lo mencionado, se considera que la mejor alternativa a la hora de adquirir un coche es la primera, que sea la empresa la que lo compre y luego lo ceda al beneficiario mediante la llamada retribución en especie.