Por muchas y variadas razones nos podemos encontrar con una situación en la que llegue a ser necesario presentar una demanda. En ese caso, es importante tener muy claro cuáles son las claves para poder hacerlo de la forma adecuada y con garantía de éxito.
¿Quieres descubrir a qué nos estamos refiriendo? Sigue leyendo porque te vamos a mencionar los aspectos esenciales que hay tener en cuenta para poder acometer esa demanda. Toma nota:
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En la demanda deben incluirse de forma exhaustiva y clara los datos completos e identificación tanto del demandante como del demandado así como sus correspondientes direcciones.
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Es fundamental que en ese documento se indiquen los hechos que la han motivado de la forma más precisa posible. Es decir, deben relatarse de manera directa los daños que se pretende que sean “subsanados”. Y eso pasa, por lo tanto, por dejar constancia clara del objeto en sí de la reclamación.
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Para poder explicar los citados hechos se podrán incorporar a la demanda los medios e instrumentos que se consideren oportunos.
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En esa demanda se puede solicitar una indemnización por los perjuicios ocasionados. En ese caso, además, será vital que se mencione una cuantía.
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Por supuesto, no hay que pasar por alto que en dicha demanda también debe quedar bien explicado lo que se pretende que la sentencia ordene a la parte demandada.
Estos son los principales aspectos que hay que tener en cuenta acerca de la presentación de la demanda. No obstante, tampoco se debe pasar por alto el hecho de que lo adecuado es contar con un abogado o un procurador que puedan asesorar de la manera más perfecta y profesional posible.
Sin embargo, hay que saber que no en todos los casos es imprescindible disponer de la ayuda de esos dos profesionales. Eso sí, si se recomienda contar con el respaldo de ellos es porque tiene conocimiento de cómo se debe redactar una demanda, dónde presentarla e incluso cómo actuar en caso de que la misma no consiga el resultado esperado.
