Puede suceder que después de ser objeto de una inspección de Hacienda el resultado de la misma conduzca a que se imponga una sanción por los motivos que nos serán notificados. Esa sanción puede ser calificada como leve, grave o muy grave, y nos obligará al pago de una multa que será proporcional al tipo de infracción que hayamos cometido.

Llegados a ese punto todavía podemos demostrar que la sanción se nos pretende aplicar injustamente y que, por lo tanto, debería de ser suspendida, o reducida en su cuantía. Para conseguirlo tenemos dos herramientas a nuestra disposición:

El recurso de reposición

En el plazo de un mes desde que se recepcionó la multa es cuando se puede presentar este citado recurso con el que se pretende dejar claro que no se está de acuerdo con el resultado de la inspección de Hacienda y que la sanción se considera injusta o incorrecta.

En concreto, debe presentarse ante el órgano que ha puesto la multa y lo que se espera es que lleve a cabo una segunda revisión de lo sucedido teniendo en cuenta las alegaciones que se presentan. Estas deben adjuntarse en un formulario junto a los argumentos para usar este recurso y los motivos por los que se cree que la sanción no es adecuada.

En esta página puede encontrar información sobre el recurso de reposición contra actos de Gestión Tributaria, en el sitio web de la Agencia Tributaria.

La reclamación económico administrativa

No obstante, también se puede optar por hacer empleo de este otro instrumento. Se lleva a cabo en el plazo máximo de un mes desde que se recibió la multa pero, en su caso, se presenta ante un organismo diferente al que estableció la infracción y la posterior sanción. ¿Por qué? Porque así se entiende que el proceso puede resultar más imparcial.

En el siguiente enlace puede encontrar más información sobre la reclamación económico administrativa contra actos de Gestión Tributaria, también en el sitio web de la Agencia Tributaria.

Estas son las dos herramientas que están a disposición de cualquier empresa que considere que la sanción que se le ha impuesto tiene posibilidades, pero es importante saber que no se puede utilizar ambas de forma simultánea.

En Cepresa nos podemos encargar de todo lo que está relacionado con inspecciones de Hacienda. En la medida de lo posible procuramos que las empresas no sean sancionadas, y de serlo, porque en ocasiones hay que reconocer que se han podido cometer errores, que esas sanciones sean lo más pequeñas posibles.

Podemos representar a nuestros clientes ante Hacienda, y encargarnos de que todo el proceso de inspección se conduzca siempre por el camino que más le puede interesar a nuestros clientes.