Cuando una sociedad está pasando por un periodo favorable y está teniendo ganancias, hay que saber que, en primer lugar, una parte de las mismas irán destinadas a la llamada dotación de reservas, como autofinanciación y para cubrir posibles riesgos y situaciones que tengan lugar a corto o largo plazo.

En segundo lugar, la otra parte puede pasar a ser repartida entre los socios, es decir, se puede llevar a cabo lo que se conoce como reparto de dividendos. No obstante, este paso es importante realizarlo de la manera adecuada, pues cualquier fallo puede generar serios conflictos.

En nuestra asesoría de Madrid, Cepresa, no dudamos en ayudar en ese sentido a quienes nos lo solicitan, y para ello, entre otras cosas, les damos a conocer algunos errores que se cometen en el reparto de dividendos.

Errores frecuentes que hay que evitar son los siguientes:

  • Se apuesta por llevarlo a cabo sin que exista previamente un acuerdo de distribución de beneficios. Este fallo suele ser habitual y por eso lo damos a conocer para no caer en el mismo. En concreto, es necesario que antes de repartir se consiga llegar al citado acuerdo a través de una junta general. En la misma se debe indicar de forma clara cuándo se procederá al reparto y la forma en la que se procederá a pagar los beneficios a los socios.

  • Se pretende repartirlos entregando a cada socio la misma cantidad. Aunque pueda resultar increíble, en ocasiones, se intenta proceder a realizarse el proceso de esta manera y eso es un error. Es un fallo notable pues hay que tener en cuenta que los beneficios se deben repartir de manera proporcional a la participación social de cada uno de los socios. Por lo tanto, se deben de recibir beneficios en función del dinero que aportaron a la sociedad.

  • No respetar lo establecido en los estatutos. Con esto nos referimos al hecho de que en esos documentos de puesta en marcha de las compañías cabe la posibilidad de que se incluyera el dividendo preferente, por ejemplo. Este, que significa que determinadas participaciones sociales tienen un reembolso prioritario frente a los demás, tiene que cumplirse siempre. En caso contrario, se estaría cometiendo un grave error que podría conducir a un conflicto dentro de la “sociedad”.

Estos son los principales fallos que pueden ocurrir en el reparto de dividendos. En Cepresa tenemos una larga experiencia en multitud de asuntos que afectan a las sociedades. Todos estos conocimientos están a disposición de nuestros clientes para que sus empresas no caigan en errores que se pueden evitar.