Existe la creencia entre quienes gestionan las empresas de que, cuando la Agencia Tributaria se pone en contacto con ellas lo hace con el claro objetivo de llevar a cabo una inspección. No obstante, no siempre es así, ya que hay que saber que ese organismo puede llevar a cabo tanto procedimientos de comprobación como de inspección.

Para poder conocer a fondo ambos, a continuación y desde nuestra asesoría Cepresa, vamos a exponer en qué consiste cada uno para que así no haya dudas de ningún tipo al respecto.

Los procedimientos de comprobación

En primer lugar, podemos indicar que la citada Agencia Tributaria puede llevar a cabo un procedimiento de comprobación limitada, enmarcado dentro de lo que son los procesos de revisión. Básicamente a través del mismo lo que se persigue es poder verificar que los datos que la empresa ha aportado a la declaración son correctos.

Se inicia de oficio por la Administración y el comienzo de las actuaciones que se llevarán a cabo se notifica mediante la pertinente comunicación al obligado tributario. Comunicación donde, además, se recogerán el alcance de las actuaciones, los derechos y deberes de aquel y la naturaleza del procedimiento.

No se trata de una inspección, por lo que el personal encargado de acometer este citado procedimiento no solicitará ni movimientos bancarios ni comprobantes de ningún tipo. Es más, ni siquiera se pondrá en contacto con los proveedores o con los clientes que la compañía pueda tener.

Eso sí, hay que tener en cuenta que este proceso puede acabar, entre otras formas, con una sanción o bien con lo que es una liquidación a favor de Hacienda.

Los procedimientos de inspección

Por otro lado, la Agencia Tributaria también puede acometer los llamados procedimientos de inspección que se pueden iniciar sin previo aviso. El objetivo de los mismos no es otro que poder verificar el cumplimiento de las obligaciones que tiene el contribuyente en cuestión y para eso se investigará a fondo su actividad. De esta manera, se puede llegar a descubrir la ocultación de lo que son ciertas actividades.

Para lograr el objetivo citado se procederá a analizar a fondo la documentación de la empresa (ficheros, libros, contabilidad, archivos informáticos, facturas, programas, justificantes…) y, siempre que se requiera, se podrá proceder a acceder a los locales de negocio que posea, por ejemplo.

Dos procedimientos que a pesar de ser diferentes, pueden tener consecuencias no deseables para las empresas, y en los que se requiere que se disponga de los mejores asistentes y representantes. Y es ahí donde Cepresa se convierte en una gran ayuda en la defensa de los intereses de las empresas a todos los niveles.

Si en su empresa va a pasar por uno de estos procedimientos puestos en marcha por la Agencia Tributaria, ya sea una simple comprobación o lo que se conoce como inspección de Hacienda, no dude en ponerse en contacto con nosotros para que le informemos con detalle de nuestros servicios que le podrán ser de gran ayuda en estos casos.